Sandrick: Encontrando esperanza en Spaulding
Otoño 2022
Sandrick (sentado), rodeado de su familia y equipo de atención médica.
La historia de Sandrick con Spaulding comenzó cuando una celebración familiar en Montreal se convirtió en tragedia.
Mientras se dirigían a casa después de una fiesta de cumpleaños, Sandrick, con sus 14 años, y su familia estuvieron trágicamente involucrados en un tiroteo sin sentido. Una bala atingió el abdomen de Sandrick y se alojó en su espalda, paralizando al adolescente y dañando su riñón, bazo y pulmones. El pasó semanas en cuidados intensivos en Canadá y en el Massachusetts General Hospital antes de venir a Spaulding para su rehabilitación.
Sandrick se dedicó a su rutina de rehabilitación. Con la ayuda de aparatos ortopédicos especializados y equipos de rehabilitación de vanguardia como el sistema de soporte de peso corporal ZeroG, los proveedores podrían colocar a Sandrick en una posición de pie durante parte de sus sesiones de terapia, mejorando su progreso en volver a aprender a caminar. "El personal de Spaulding fue excepcional", dijo su padre, Ricardo. "Sandrick ha progresado mucho". Ahora tiene movilidad en sus piernas y sueña con volver a jugar al baloncesto.
Como muchos de nuestros pacientes, Sandrick y su familia se consolaron con la compasión y la habilidad del equipo de atención médica de Spaulding, y con los recursos disponibles para él durante su recuperación.
Las donaciones ayudan a Spaulding a realizar inversiones para servir mejor a nuestros pacientes: inversiones en el equipo y la tecnología de rehabilitación más nuevos, educación continua para proveedores e investigación innovadora para avanzar en la medicina de rehabilitación. Las donaciones sin restricciones al Fondo Anual de Spaulding tienen un impacto inmediato.
Los padres y hermanos de Sandrick están encantados de tenerlo en casa. "Estamos muy agradecidos por todo el personal de la unidad pediátrica de Spaulding", dijo Ricardo, "incluso los médicos, los atendentes de atención al paciente, Jacqueline, nuestra enfermera, Francesca y Michelle, nuestras fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales, por llevar a Sandrick a donde está hoy". Sandrick ahora asiste a la escuela secundaria, continúa su terapia ambulatoria con Spaulding y pasa tiempo con sus amigos devotos, y con su nuevo perro, un toy poodle de color de chocolate al que acertadamente llamó de "Esperanza".